martes, 10 de mayo de 2016

¿A DÓNDE VAN LOS DÍAS TRANSCURRIDOS? X




X



Desde que floreció el silencio más oscuro,

Miles de ríos se precipitan a la tierra.

Desde los tiempos de la aridez,

Cientos de océanos se extinguen

Como cuchillos de hierba

Crispados por sus lámparas.

El hombre,

Ese pequeño saltamontes,

Bebe las ánforas humeantes:

Tiene la sed de un ejército,

El hambre de un ejército en los fracasos de la guerra.

La lluvia es la forma más elemental de congraciarse con el mundo;

Esa será siempre su victoria,

Su manera de sonreírle a la soldadesca de la muerte

Que abnegada transita por la oscuridad. 

domingo, 1 de mayo de 2016

¿A DÓNDE VAN LOS DÍAS TRANSCURRIDOS? IX




IX




Cuando el cerezo se desgaja con la tarde

Sólo queda una ventana,

Un pequeño precipicio que asoma al horizonte.

Cada capullo de la fruta es una alcoba al firmamento,

Un extenso dormitorio

Por donde temblorosos pasan los años.

En esas habitaciones se respira el mundo,

El olor de las frutas que no fallecen,

Que persisten en aromar la noche.

Desde esa ventana veo trinar las aves

Y creo que la vida aún es hermosa para llorar con ellas.


domingo, 10 de abril de 2016

¿A DÓNDE VAN LOS DÍAS TRANSCURRIDOS? VIII



VIII



Y la casa se fue resquebrajando.

Fue como una fruta fresca,

Expuesta al maderamen de los días.

Entonces se fue hinchando para sí;

Se fue desmoronando sobre la arenisca de la noche.

Los dedos dolían tratando de frenar su precipicio,

Tratando de interrumpir lo inexorable:

Cuando algo está al borde del abismo

-como la muerte misma-

No hay ángel o demonio que detengan lo que Dios pone a rodar.






domingo, 3 de abril de 2016

¿A DÓNDE VAN LOS DÍAS TRANSCURRIDOS? VII




VII
Al pueblo de Hazara.




Respiro

Me tomo los alientos que hay entre una vida y otra.

Es lo único que queda

Lo que logro encapsular en el camino por la muerte.

Todo sucede tan a prisa,

Apenas levanta uno la vista al aire

Y otro dardo es disparado

Con la mezquindad con que se dispara el atributo

El sueño,

La pocilga que se tiende cada vez que fallece un escritor.

Entre una vida y otra

Siempre habrá un resuello por recoger

Un lamento por coleccionar.

El cáñamo que se arrojó desde la infancia

Se va desmenuzando hasta quedar reducido a eso:

Otro aliento;

Es como si uno recogiera con nostalgia

Los fardos que van tirando a la vera del camino.

Nadie sabe quiénes son  sus dueños

Nadie  lo que llevan dentro.

Entre fardo y velas

Se va desmoronando la vida,

Lo que queda de su vaho.

El aliento puede ser el nuestro:

Una tímida esperanza empaquetada para la suerte de los que faltan por morir.







domingo, 13 de marzo de 2016

¿A DÓNDE VAN LOS DÍAS TRANSCURRIDOS? VI




VI



Las quince candelas que se van apagando

Asemejan la vida.

Cada candelabro es una historia,

Un ascender por el primer borrador de tu página de espejos.

El ir descendiendo por estos cristales

Supone cierta alegría inocente:

Uno va destejiendo retazos

Pequeños ardores de infancia y de juventud.

La madurez se torna sombría conforme avanzan las horas.

La llama del pábilo oscurece;

No por los años que desfilan entre montículos

Sino por el tapiz “racional” que le añadimos a lo que resta de camino.

Hay una vela que no se apaga nunca,

Que insiste en un eterno resplandor

Pese al frío que traen consigo las primeras lámparas del día.

Quizás sea la muerte

La flama del vacío más puro


Que fulgura junto a la llama que obstinada golpea a la puerta.

domingo, 6 de marzo de 2016

¿A DÓNDE VAN LOS DÍAS TRANSCURRIDOS? V



V


Mi joven amada

Habla de lustros y de décadas

Como si se tratara de una flor abierta

A la lengua de una mariposa.

Es como si de su boca todo rejuveneciera,

Todo adquiriera el brillo del celofán

Para la navidad que aún no hemos tenido.

Mi joven amada me habla del invierno

Como si la hora del otoño estuviera aún distante.

Para ella no existen las partidas;

Nuestros hijos retozan sobre el árbol de la noche


Y los vientres desnudos aguardan el calor de una luna nueva.

Mi joven amada no sabe que cien años

Duran lo que un pábilo en la superficie de una lámpara.

Todo ha pasado para los dos.

                                                   Todo ha terminado para los dos.
Mi joven amada me abraza;

No sabe que se envejece


Mientras una hoja cae sobre el césped del solar.




domingo, 28 de febrero de 2016

¿A DÓNDE VAN LOS DÍAS TRANSCURRIDOS? IV



IV



Los días en el calendario

Son como pájaros de ceniza

Crispados hacia un molinillo de viento.

Sorprende cómo pasan las horas

Los esqueletos sin máscara de los años.

Todo corre como una estrella de hielo

Como un meteorito sin sombras.

Sorprende cómo los ojos parpadean

Ante la visión de los trienios transcurridos…

                     …De lo que hace una década era.

Así es el tiempo

Un copo de escarcha

Derretido en la espiral de un brasero sin luz.



domingo, 21 de febrero de 2016

¿A DÓNDE VAN LOS DÍAS TRANSCURRIDOS? III





III


Al poeta Italiano
Gerardo Sangiorgio (1921-1993)



Y pensar que nada permanece

Que todo lo dicho es como una flecha arrojada al viento.

Que incluso las palabras son evanescentes

Frágiles ante los labios que las pronuncian

Pero que pudieron

(Debieron) callarlas.

Todo es fugaz:

La mano levantada

El puño aferrado
 
La boca hambrienta del deseo.

Nada queda:
 
Lo lógico es la impermanencia,

El ancla que se aferra a la muerte
 
Y a su vacío más puro.



domingo, 14 de febrero de 2016

¿A DÓNDE VAN LOS DÍAS TRANSCURRIDOS? II



II




La música es lo único que queda después de la muerte.

Un viejo murmullo de lo que fuimos

Quedará suspendido sobre las teas del tiempo.

Acaso alguien camine nuestros pasos

Recorra esas huellas borradas por los borbotones de un océano acústico.

Al menos seremos eso:

Viejas sandalias calzadas por una muchacha que secunda

Lo que creíamos era el camino.



  

domingo, 7 de febrero de 2016

¿A DÓNDE VAN LOS DÍAS TRANSCURRIDOS?



I



¿A dónde van los días transcurridos?

¿Aquellas pequeñas sombras de lo que un día fue sol?

¿Por qué nos es tan esquivo eso que llaman mañana?

¿Eso que asomaba detrás de las montañas como  porvenir?

La piel se cuaja,

Los huesos se quiebran

Y los días corren como briznas de paja en ojo ajeno.