…En la comunión
orgásmica con el mundo
Los astros giran con
la misma velocidad con la que ruedan los besos.
Los cuerpos se
levantan en esa danza cósmica,
En ese fluir de
conciencia metafísica.
Una estrella negra
asoma su lux por donde antes todo era oscuridad;
Todo es resplandor
Resquemor infinito de
fuegos artificiales.
El mundo escamotea
dentro de la piel de un lagarto
Muda sus huesos como
una serpiente amatista;
Jaguar en medio de
flamas y evangelios antiguos.
Todo es crecimiento
Búsqueda infinita de
lux:
El mundo surca mi
sangre
Atraviesa mis
relojes.
Cada minuto es un
alarido a la muerte
Un confrontar a la
muerte en la arremetida del tiempo.
La muerte es lo
verdaderamente grande
El fin que justifica
la vida,
El camino,
Los pasos por el
laberinto de la noche.
Y así el mundo se
levanta
Adquiere sus propios
cantos
Los himnos que
santifican a quienes morimos.
El mundo es un
afrontar
Un continuar
Un ponerle la cara al
sol.
Entonces
Los astros giran con
la misma velocidad con la que ruedan los besos:
A prisa
A prisa
Siempre ascendiendo
hacia agujeros impredecibles
Obscuros…