jueves, 8 de mayo de 2014

LA MORTE



La morte

A Laurent Vigouroux,
morto a  Iquítos - Perú, 24 aprile 1999.  


Come posta in uno spazio vago e remoto
la morte si va avvicinando  fino a prenderci la mano.

Si può pensare che essa sia  la nostra ombra o il nostro sonno,
magari una sorella maggiore
che da molto tempo ha abbandonato la casa
ma che d’un tratto ci sorprende
con la sua ondulata presenza
o il suo pianto di prodiga bambina. 

Nell’ebbrezza della notte  la morte  
col suo canto di civetta,
con le sue grandi ali d’oro arrossate dal fuoco,
ci risveglia dal sonno o dal letargo
ci lancia verso la calma definitiva del buio. 

Allora comprendiamo che ci è stata sempre vicina
che la sua presenza era come il fragore d’un fiume
che costeggia il margine della nostra foce più vicina. 

Ma nel momento dell’abisso
nel momento del concerto fatidico
-quando l’uccello Fanza canta il suo requiem nel cortile interno o suonano le antiche campane-
la morte ci è tanto familiare
tanto nota che l’ombra impenetrabile
d’improvviso si trasforma in esplosioni di fuoco
e la notte orrida
in un labirinto di profumi
da dove cominciano a fiorire anemoni
nel casolare posto sull’altra sponda.

WINSTON MORALES CHAVARRO
Trad. di Angelo Manitta 

domingo, 4 de mayo de 2014

ANIQUIRONA XIX

Pintura de César Santos


XIX




¿Sabes lo que está escrito en el olvido?

O en la memoria divina del túnel?

¿Sabes dónde remontan las cometas del sueño

después del aire cetrino?

¿Dónde andará aquel aire?

¿Dónde El viento que mece el ciprés y la encina sagrada?



Aniquirona que danza entre árboles viejos

¿Qué es lo que canta el pájaro de la noche

en este camino a Schuaima

en este recoveco azul

cuya música llamea como una espiga

y funde en la espirálica noche

esta líquida sombra

que diluyen mis miembros

hasta volverse un cordón amarillo?



Forastera

Para la luz basta cualquier sueño

El principio: Mariposa, cometa alada

Viene después de la noche

Cuando alas despliegan al borde de la bujía

En donde la oscuridad es suave

Y pasa como un río

Encandilando de hermosas tinieblas mis ojos,

Blancas y crespas tinieblas

Donde el canto y el grito

Son música lumínica

Donde el salmo y las voces

Apenas un himno

Que resplandece a oscuras.






domingo, 27 de abril de 2014

ANIQUIRONA XVIII

Pimtura de César Santos



XVIII


Mujer en el espejo
Dime, en dónde empieza el tiempo
Yo soy el polvo que no vuelve al polvo
Soy la lámpara que busca el combustible
O acaso la luz precisa
De llama candorosa.

Es preciso reconstruir el tiempo
El inexistente tiempo
El de tez arrugada y pálida
El inventado por los jóvenes
Y maldecido por los viejos.

Yo soy el polvo que no vuelve al polvo
Soy el barro sagrado que quedó en las manos
De un hombre viejísimo,
Soy la luz, la crisálida,
La frágil mariposa que se endurece con los días.

Es preciso reconstruir el tiempo
Dibujarlo con otros rostros, con otra cera
Hacerlo liviano
Desnudarlo y vertirlo como un niño
Hacia otra orilla
Decirle en la cara que no existe.

Dime en dónde empieza el tiempo
¿Dónde la música del olvido?
¿Dónde la resurrección de la palabra?
¿Dónde sin la vaciedad de ese infante tiempo
que persiste en agobiar a los espíritus felices
y a los hombres laureados por el sueño?




domingo, 20 de abril de 2014

ANIQUIRONA XVII




XVII



Extranjera
Hemos llegado a este ritual
Esta es la ceremonia de las flores
El ritual de la palabra;
Palabra olorosa que se expande
Como enredadera de músicas balsámicas
Y que trepa suavemente
Por la savia de los árboles.

Esta es la ceremonia de las flores
Entra y gózate la fiesta
Entra y gózate la vida
Ven a festejarme
Todavía hay vida en estas manos
Tómalas
Estas manos que aún escriben
Poemas de amor para mujer solitarias.

He venido a esto festejo
Llorando ante la belleza de la noche.

Aniquirona
Diana de los bosques
¿Dime hasta que lugar se extienden tus visiones?
¿Dónde el cáñamo de la música?
¿Dónde las hogueras de los besos?
¿El suave murmullo de las hojas?
¿Qué de venturoso tiene
ser laureado por la muerte?

En algún punto
Entre la vida y la muerte
He venido a este reencuentro,
Todavía hay vida en estas manos
Míralas
Ellas escribieron con anterioridad
Sobre estas cosas
Ellas pronosticaron
Esta magnificencia


Este acto de laurear a los hombres soñadores
Este acto de celebrarse mutuamente
Cuando silencio, poesía y muerte
Suelen restituirnos.