domingo, 1 de diciembre de 2013

CIRCE



XXVIII

CIRCE


 




Y el amor regresa siempre,

Recorre los caminos

Por donde una vez anduvo.

¿Qué es el amor sino el tiempo perdido?

Aquel que nunca ha doblado sus relojes

Viene sobre esta playa cuyas olas carecen de circunferencia:

Aquí de nuevo el amor,

el pasado que es otra forma de pasado,

El presente que no existe sino en la luz del abandono.

De nuevo el amor,


Las esferas, los navíos, las batallas.

De nuevo el descenso al Aqueron

El ascenso a una visión que ya no existe:

Nunca se parte hacia lo oscuro

Quedan las cosas gravitando por el éter,

Los huesos, la carne,

El éxtasis metafísico levitando entre la sal.

¿A qué has venido hijo de Laertes?

¿Para qué emerger de la espuma y de la nada

Cuando tu vientre ya dibuja otras raíces

Y esas fisuras dejadas por el tiempo

Surcan los imperios de lo ruinoso?

Ahora que las luces de la muerte


Asoman su portento por tu puerta

¿Para qué dejar de nuevo Ítaca?

¿Qué puedes amar en esta mujer

Cuya mejor edad es la de la hechicería

Y mejor principio la debilidad de lo que nunca amaste?

Aquí de nuevo el amor,

Telémaco, Filoctetes, la saga

De nuevo Ulises, el preclaro,    

Las piedras

La figura de un reloj cuyo péndulo es la muerte

Y su mejor círculo

El estado intermedio entre el tiempo

                                                  Y un vacío que no termina de llenarse.







domingo, 24 de noviembre de 2013

ÍCARO



 

XXVII

ÍCARO





Tus ojos son mis alas.

A través de ellos me descubro

Y veo la vida sin dobleces,

Sin sombras.

Cuando tus ojos me confrontan

Cuando vienen sobre los míos

Sé que son mi vuelo

El motor de lo estacionado

La cera perdida que cose mis plumas.


Y cuando desnudo me remonto a las alturas

Tus ojos me dan la claridad para salir de ciertos laberintos

Me dan las alas,

La simetría de un ángel ortodoxo,

La tranquilidad de caer

Sin lograr el purgatorio o las brasas del que peca.


Tus ojos me hacen libre,

Me redimen de cadenas ganadas con el tiempo,

Fraguadas por mi condición de hombre;

Mi circunstancia de cordero fuera del astil.

Cuando me vislumbras,

Cuando elevas tus ojos a mis latitudes

Me siento un ángel patriado en tu universo

El hombre recuperado

El pecador feliz de su destierro.

Tus ojos son mis alas

El motor que nunca tuve

La hoguera que calcina y quema.


Tus ojos:

Perdición,

Pecado,

Alimento.


 

 

 

 

 

 


 

domingo, 17 de noviembre de 2013

DIONISO



XX 
DIONISO


E se la vita fosse piú che il Nettare che viene dalle tue labbra?

Se fossi certo che aldilá dell'ambrosia delle tue cosce

Corre per il firmamento un soffio leggero;

Un alito di nube nera, di stella Oscura

Che tutto redime,

tutto accomoda?

Non immagino niente

aldilá della transizione dei tuoi affluenti:

Tutto ció che verte alla frutta del tuo sesso

Possiede quel liquore, la bibita, quell'elisir

Che derivano solo dal tuo odore,

Dalla tua euforia;

Il piatto condito e squisito delle tue gambe.

Mi perdo nei tuoi beveraggi

E non credo che il mondo sia diverso

Oltre questi estratti

Nè Zeus nella sua mutazione vaccina,


Nè Efeso nello sciogliersi delle sue carni,

Né Faon di Lesbia nel rinnovamento delle sue vesti

Hanno rinunciato alla corroborante delizia di ubriacarsi nelle acque

della tua pelle.

Come un cittadino di Elide

Ho conosciuto il cosmo concesso per il tuoVino;

Gli arcani staccati della tua Rosa dionisiaca.


I satiri,

I cortéi,

Le valchirie

Sanno che questo é una veritá di ferro:

Tutto quello che emana contiene il dolce paradigma del

licenzioso,

L'ignominia di mescere i bicchieri,

La sventura di curare la bocca desiderosa

precipitandosi al bacio.

E se la vita comincerá su un'altro margine?

Se la Vite che pende dai fili del tronco

Troverá un altro destino dopo la morte?




WINSTON MORALES CHAVARRO
Traducción: LOREDANA MARTORI