XXII
LA LUNA
I
…Me gusta cazar
sonidos
Suerbo sonidos,
Músicas pequeñas
Livianos hilos de
agua.
El silencio es mi voz
A través del silencio
me llega todo:
Ecos,
Ausencias de voces
Los pasos de una
libélula de cobre
Que se desprende
desde mi vientre de Lux.
“La luna es de sangre
fría”
-Dicen algunos-
Lo que no saben es
que mi corazón camina despacio
Palpita con la
infinitud de lo que nunca perece.
Todo lo que sube a mí
Necesariamente
regresa.
La gran culpa no es
la gravedad,
El descenso,
El lazo que sujeta el
cuello de quien asciende hacia el vacío.
Cada quien cae en el
momento justo
-todos deben caer-
Dice Hécate;
La caída provee alas
Miradas
Olores…
II
…La sed es un olor
Un color
Una música que vuela
Hiere los fractales.
Las flores en el
piso,
Los pies alzados
sobre el humo.
Un olor,
Mejor un olor
Y la muerte lejos
Rondando otras
esquinas
Distante de esta
terra
Olvidada del
Multiverso
De las esferas y los
ciclos de la noche.
La simulación
Esa que repta a
través del sueño
Que fluye y refluye a
través de las sombras
Edifica
El sol
El juicio
El mundo
El loco
Todo está escrito en
la luna
En la tríada femenina
que me habita;
Todo grabado en mi
piel
En mi belleza
telúrica:
Selene,
Artemisa,
Hécate
Reinas del cielo
nocturno,
De la tierra
Del abismo
subterráneo
Todo fijado en ellas:
Lo que canta y lo que
calla
Lo que suena y lo que
vibra
Silencio,
Silencio,
Silencio…
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